Exposición en la Audiencia Pública: Gestión Integral de Residuos Sólidos Urbanos en la Ciudad de Buenos Aires


La gestión de Residuos Sólidos Urbanos en la CABA ha pasado a ser, a lo largo de la última década, una utopía para los decisores políticos y un profundo problema para los vecinos en general.

La realidad muestra que las acciones hasta hoy emprendidas se iniciaron como resultado de la necesidad extrema de un sector de la sociedad, situación esta usufructuada por quienes deberían haber previsto ya desde el año 2000 una gestión responsable de los RSU en la ciudad.

El proyecto en consideración abre una profunda oportunidad de superación en lo atinente a la gestión de los RSU. Por primera vez, luego de varias décadas, se analiza y propone la consideración del servicio de limpieza y recolección, incluyendo todo aquello afín al tratamiento, reducción y recuperación de los RSU.

Es a partir de esta instancia que cabe entonces hacer algunas consideraciones al respecto, que entiendo de vital importancia a los fines del aporte necesario para el ajuste del pliego definitivo.

En lo atinente a los residuos húmedos cabe consignar la temática referida a la planta de compost, pues a los efectos de la materialización deberá quedar definido en el Código de Planeamiento Urbano la posibilidad de emplazamiento previo al llamado a licitación, debiendo contemplarse además un estudio pormenorizado de las posibilidades de aplicación del resultante de la planta.

En el mismo sentido de lo expuesto, me debo referir a la planta de áridos, pues lo ya existente al respecto en la ciudad resulta de carácter precario y sin una clara previsión al respecto.

Una mención aparte merece el sistema de contenerización de residuos. La experiencia demostró que es preciso emprender una fuerte campaña de educación y concientización de la población, de manera sostenible, con el fin de lograr una efectiva y eficaz utilización, al tiempo que es necesario un adecuado control y mantenimiento de dichos contenedores.

Se deberá hacer hincapié en ambos pliegos sobre la difusión y culturalización de la gestión de los RSU. Este aspecto no puede ser desestimado, ya que la participación social en la gestión de los residuos resulta fundamental para el funcionamiento de todo el sistema.

En lo que respecta a la gestión de residuos secos, uno de los aspectos fundamentales será el funcionamiento de los Centros Verdes. Estos centros deberán contar con la previsión del equipamiento adecuado, junto con su respectivo mantenimiento. Asimismo, se deberá considerar la factibilidad de habilitación de dichos centros, los cuales no están contemplados dentro del Código de Planeamiento Urbano. En este aspecto es necesario recalcar que de acuerdo a la cláusula transitoria de la Ley 1854 (Artículo 58), las metas de reducción solo serán efectivas a partir de la incorporación en el CPU del uso asimilable a la función de Centro de Selección o Centro Verde.

En el mediano plazo, se deberán contemplar la construcción y puesta en funcionamiento de plantas de tratamiento integral de los RSU, con el fin de lograr una mayor eficiencia ambiental en dicha gestión.

Es de suma importancia dignificar el trabajo que han venido realizando los recuperadores urbanos, ya que desde la sanción de la ley 992 en el año 2002, iniciadora del reconocimiento de los recuperadores urbanos, no se ha dado cumplimiento real y efectivo al espíritu de la misma.

Por último, uno de los aspectos principales a considerar deberá ser el de la provisión de equipamiento de protección personal para quienes desarrollen la actividad de recuperación urbana, pero muy especialmente será necesario prever la metodología que permita asegurar un ingreso mínimo, ante las variaciones del precio del material recuperado.

 

27 de julio de 2010