PROBLEMÁTICA DE RESIDUOS URBANOS: entrevista Radio Continental

 


Medio: Continental
Programa: RH Positivo
Entrevistado: Atilio Alimena
Fecha: 23/03/2006 10:52

 

Cromañón sanitario

Rolando Hanglin: Bueno, acerca de todo este problema de la basura en la Ciudad de Buenos Aires y el Gran Buenos Aires conversaremos con don Atilio Alimena, defensor adjunto del Pueblo de la Ciudad de Buenos Aires; ¿cómo le va señor?

Atilio Alimena: Buenos días, ¿cómo está usted?

RH: ¿Cómo anda?

AA: Bien, acá andamos.

RH: Bueno, seguramente no será novedad para usted, porque es un asunto que ya pasó de castaño a oscuro, pero estamos recibiendo un aluvión de denuncias sobre montañas de basura en distintas esquinas, y lugares, y barrios, de la Ciudad de Buenos Aires.

AA: Sí. Dos cosas voy a aclarar: primero, nosotros desde la defensoría no somos quienes lo podemos resolver, pero esto no es para lavarme las manos sino para no seguir acumulando explicaciones; y la otra, no le voy a explicar a usted todo lo que usted, suelo escucharlo por radio, todo lo que usted describe. La realidad de esto, como para ir orientando la cosa y que todos podamos ayudar a que se active el engranaje, es que en la defensoría recibimos muchísimas denuncias, yo diría en cuatro aspectos, en lo que hace a residuos urbanos: uno es la recolección, o sea, la calidad del servicio de recolección en cada una de las empresas; el otro es el barrido, que es algo secundario pero no menor, porque es lo que limpia, el viejo barrendero que conocíamos; la otra es la acumulación en algunas esquinas, que ahí directamente la responsabilidad diría es de los vecinos, porque en las esquinas no se puede tirar basura bajo ningún concepto, y si por alguna eventualidad hay algún elemento voluminoso se tiene que llamar por teléfono a la empresa que corresponde a cada uno de los (...)... Que después si quiere lo tratamos, que es la zona sur de la ciudad, que ha tenido un fallo judicial en estos días, inundación y demás. Ahora, la pregunta es por qué esto no se soluciona, esa es la pregunta del millón: hay tres leyes o normas en la Ciudad de Buenos Aires, con lo cual, con la modesta aplicación de ellas, tendría la ciudad limpia; y si algo faltara como para reforzar estas tres normas, hay cinco normas, cinco leyes, a nivel nacional, que rigen para todo el país –que son residuos domiciliarios, otra de residuos industriales, otra de presupuesto mínimo ambiental, como (...) de la basura a la población, y la otra de residuos peligrosos–, que le dicen todo lo que el estado tiene que llevar a adelante para que el vecino que paga sus impuestos no tenga ningún tipo de problema. La pregunta del millón seguramente es por qué no se hace. Bueno, acá hay dos temas, que es lo que desde la defensoría sistemáticamente advertimos y reclamamos, pero la defensoría no es resolutoria sino que son recomendaciones, que después los funcionarios tienen que cumplir, y en algunos casos lo cumplen y en otros no; y cuando el caso es extremo bueno, después se recurrirá a la justicia. El tema es que a veces los controles son sumamente ineficientes, le diría en la mayoría de los casos, entonces cuando se detectan estas desviaciones se acuerdan, uy, hay que reclamar, y se hacen las correcciones; en otros casos lamentablemente o no se aplica la norma o se desconoce la norma, o... Bueno, lo dejaría ahí, desconoce o no se aplica. La realidad en la Ciudad de Buenos Aires... Nosotros desde la defensoría estamos terminando de elaborar un nuevo trabajo, que más allá del reclamo va a ser un diagnóstico en lo que es el tema de residuos en la ciudad, porque se ha visto sumamente agravado todo lo que es la limpieza en la ciudad a partir de la puesta en marcha, en el año 2003, de lo que, personalmente opino, fue algo digamos momentáneo, una solución inmediata, pero no previó como encarar el tema de la recolección diferenciada de residuos; o sea, digamos, como que había un sector social que gracias a dios encontró una salida (...), porque estaba en un momento muy crítico, el estado no lo supo ver antes, y de alguna manera, como que liberó el corral, abrió la puerta, la tranquera, salió todo el mundo, y sálvese quien pueda. Bueno, ahí estamos hablando de las consecuencias, porque esta gente no ha mejorado su situación sino que ha agravado si situación social, y la realidad es que la ciudad es un desastre.

RH: Yo por otro lado... Bueno, está muy bien lo que usted diagnostica, la ciudad es un desastre, sí; ahora, yo quisiera relatarle lo que yo veo, como modesto ciudadano, y lo que otros ven, porque tienen los mismos ojos que tiene uno: yo veo, en las esquinas, por ejemplo en la esquina de esta radio, a las siete de la tarde, cuadrillas trabajando, no de personas desheredadas, cuadrillas de trabajadores, informales, que (...) tienen capataz, hay mujeres, hay como secretarias, son equipos de trabajo de una industria, hay camiones que vienen; en la vereda se procede a armar enormes bultos, le diría que de dos metros de lado, cuadrángulos, se trabaja, es una industria eso, están desde las seis de la tarde más o menos hasta las dos de la mañana. Aquí se ha montado una industria; pero no paga impuestos, ni paga obra social, una industria clandestina; porque seguramente el camión de la basura, entre otras cosas, no pasa, no debe pasar.

AA: Bueno, justamente, refuerza lo que yo le estaba diciendo lo que usted comenta ahora. El hecho es que lo que se creyó que era, que no es lo que el estado tendría que hacer, una "acción de caridad", liberando esto, terminó en una situación de esclavitud para mucha gente, porque a lo largo de los años, en estos dos últimos años, a partir del momento de la ley 992 que libera la posibilidad de recuperación por parte de quien quiera, se han (...) organizaciones. Algunas con buena finalidad han formado algún tipo de cooperativa, y digamos que tienen una vinculación con quien organiza la ciudad, que es el estado, y medianamente tienen algún espacio, algo, y trabaja un conjunto de personas; otras organizaciones, que generalmente vienen desde ámbito del conurbano, no son tan santas, o sea "contratan", porque es a ver, vos vení, gente, informalmente, que realmente terminan en un estado de esclavitud, porque esta gente sí junta material como para hacer algunos pesos importantes, pero lo que percibe no es eso.

RH: Claro. Entonces, entre las advertencias de su diagnóstico, ¿está la advertencia de que esto es el anuncio de un Cromañón sanitaria para toda la ciudad?

AA: Sí, por eso es que le digo que nosotros emitimos resoluciones, pedimos informes, y la Constitución dice que tienen que ser tenidos en cuenta, si usted no lo quiere tomar usted es el responsable. Ahora, el hecho real es que hasta ahora venimos haciendo recomendaciones y pidiendo informes; vamos a emitir en pocos días más un diagnóstico preciso, donde se ponga de manifiesto la amenaza, desde el punto de vista sanitario, para la población, y el sometimiento que se está realizando sobre personas que están tratando de sobrevivir a costa de la recolección y mediando la explotación.

RH: Ahora, si hay sometimiento es porque hay algunos que son sometidos y otros que son los sometedores.

AA: Exactamente, que son los camiones que usted ve, de brutal porte, que entran en Buenos Aires, en óptimas condiciones, porque no son los camioncitos del (...) que supimos conocer sino que son camiones en óptimas condiciones, con horarios, paradas, carros que suministran a los efectos de que hagan el trabajo y luego los reintegren; o sea, hay todo un mecanismo cuasi industrializado y comercializado, por eso yo estoy hablando de explotación de las personas y sometimiento, casi le diría, a las condiciones de la esclavitud. Esto se está asemejando a lo que es los temas de la costura, con inmigrantes bolivianos, coreanos, que someten... Recientemente la defensoría ha hecho una denuncia penal al respecto. Bueno, esto digamos que ha tomado casi esa dimensión.

RH: Bien doctor, gracias, muchas suerte.

AA: No, por favor.

RH: El doctor Atilio Alimena, defensor adjunto del Pueblo de la Ciudad de Buenos Aires.